¿Sabías que las barreras más difíciles y a la vez más fáciles de superar son las que nos ponemos a nosotros mismos?
En el día a día, la influencia de tus creencias, tanto de las que eres consciente como de aquellas inconscientes, establecen la dirección que vas a seguir para actuar – o incluso para no hacerlo -, y eso determinará qué tan difícil o qué tan fácil te resultará vivir las experiencias que haya en el camino para tu crecimiento, y el sentimiento acerca de cómo es la vida que estás viviendo.
En la esencia de las creencias que limitan negativamente la experiencia, se encuentra una forma errónea de procesar los hechos.Lo que típicamente nos lleva a:
- Interpretar la experiencia en términos absolutos, o polarizados.
- Concluir, basados en un caso particular y extenderlo como si todas las situaciones fueran exactamente iguales, o dicho de otro modo estableciendo una generalización.
- Centrar la atención sólo en una parte de la experiencia, casi siempre negativa, sin considerar los aspectos positivos.
- Asumir culpa de todo lo que sucede, lo que conduce a que la persona piense que no es suficiente ni buena para algo.
- Sacar conclusiones basado en una emoción en lugar de analizar los hechos observables, esto es lo que da origen a un sin número de creencias limitantes.
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Un abrazo.
